Fuerzas Armadas de Chile y Argentina unidas durante Solidaridad 2016
El 15 de diciembre, la Revista Diálogo Américas publicó una entrevista en la que el Jefe del Estado Mayor Conjunto de Chile, General de Aviación Arturo Merino Núñez, realiza una evaluación del último ejercicio binacional Solidaridad 2016.
Los ejércitos, fuerzas aéreas y armadas de Chile y Argentina están preparados para auxiliar a la población ante una catástrofe natural en cualquiera de sus territorios, en cualquier momento. Estas fueron las conclusiones de las autoridades militares de ambos países el 24 de noviembre, tras haber evaluado los resultados del Ejercicio Solidaridad 2016, llevado a cabo del 4 al 7 de octubre. “(Solidaridad) comprobó la coordinación existente entre los medios de la defensa de ambos países para la organización y materialización de apoyo mutuo. Además verificó el cumplimiento de los protocolos y normas definidas para ello”, dijo el General de Aviación Arturo Merino Núñez, jefe del Estado Mayor Conjunto de Chile. Este ejercicio entrena las capacidades de respuesta militar y de interoperabilidad de ambas fuerzas armadas en forma conjunta y combinada, para enfrentar la ocurrencia de un desastre natural, según lo establece el Acuerdo sobre Cooperación en Materia de Catástrofes firmado en 1997 por Chile y Argentina. De ser necesario, un país actúa en beneficio del otro. Desde el año 2001, el ejercicio es realizado cada dos años de forma alternada entre ambas naciones. A diferencia de otros entrenamientos militares, Solidaridad es realizado con una dotación militar representativa del personal que sería destinado en una situación real de emergencia. Esta dependerá de la necesidad que requiere la amenaza abordada en cada entrenamiento.
Este año el despliegue fue de 1.000 militares, 142 efectivos de Chile y 858 efectivos de Argentina, más aeronaves y medios de transporte terrestre y marítimo, además de los organismos de protección civil. Recordando lo aprendido Durante el proceso de compilación de las experiencias y lecciones aprendidas, fue destacado “el alto nivel de profesionalismo de los militares, que permitió ejecutar un entrenamiento avanzado, sin contratiempos y con un alto nivel de eficacia”, dijo el Gral. Merino Núñez. Entre las implicaciones operativas que tuvo Solidaridad 2016, las personas responsables de los medios en caso de un desastre real establecieron contactos y enlaces entre sí, “lo que permite una comunicación más eficiente en una eventual ejecución”, dijo el Coronel José Antonio Saumell Robert, del Ejército de Argentina, quien dirigió esta octava versión de Solidaridad, realizado en San Martín de los Andes, Argentina. El Ejercicio Solidaridad 2016 bianual está enfocado en el entrenamiento entre las Fuerzas Armadas de Chile y Argentina para asistir a la población ante una emergencia natural real.
Entrenamiento en cielo, mar y tierra Solidaridad tiene componentes marítimos, aéreos y terrestres, y verifica la capacidad de respuesta conjunta de las fuerzas armadas frente a un desastre natural. Este año, los trabajos de entrenamiento fueron en torno a una erupción volcánica. Esto, tras la erupción del volcán Calbuco, el tercero más peligroso de Chile, el 22 de abril de 2015, que amenazó a la población de la región de Los Lagos y a las provincias de Neuquén, Río Negro y Chubut por el lado argentino. Ahora ya saben cómo hacer frente a este tipo de emergencias. En el contexto de dicha amenaza volcánica, el ejercicio incluyó diez simulacros de operativos: erupción volcánica, incendios forestales, cooperación aérea, purificación de agua en caso de contaminación, búsqueda subacuática, instalación de hospitales de campaña, y búsqueda y rescate de personas en estructuras colapsadas.
En cada operativo los efectivos militares debieron demostrar sus habilidades en tierra, salto desde helicópteros en movimiento, traslados en lancha y prestación de asistencia médica. A partir de esta experiencia se establecieron procedimientos para enfrentar una catástrofe volcánica y se modificaron los protocolos de acción por parte de la Unidad Ejecutora del Apoyo, encargada del trabajo operativo y administrativo en caso de una situación real. Así por ejemplo, después de movilizar efectivos y medios de apoyo desde un país a otro, “fueron verificados los detalles administrativos que no pueden ser identificados claramente al efectuar los movimientos en forma simulada”, explicó el Gral. Merino Núñez. En el caso de Chile, el proceso involucró definición de los medios a emplear, su preparación, traslado, utilización en territorio argentino y su regreso al país. Este desafío logístico, administrativo y de mando fue evaluado satisfactoriamente por el Gral. Merino Núñez, quien destacó la capacidad conjunta desarrollada para ejecutar este tipo de actividades.
Una de las maniobras fue la búsqueda y recuperación de cuerpos sumergidos, con el apoyo de tecnología sonar. En la maniobra participaron 21 efectivos del grupo de Buzos Tácticos y de los Comandos de la Infantería de Marina del Comando de Fuerzas Especiales de la Armada de Chile, junto a sus pares trasandinos. En el pasado, integrantes de este equipo prestaron ayuda a la población en el terremoto y tsunamis de 2010, en el sur de Chile. “Dada su trayectoria han sabido potenciar sus capacidades en apoyo a la ciudadanía”, dijo el comandante de Operaciones Navales de la Armada de Chile, Vicealmirante José Miguel Rivera. El componente aéreo contó con 25 integrantes de la III.ª Brigada Aérea de la Fuerza Aérea de Chile (FACh), quienes entrenaron la evacuación de personas desde estructuras colapsadas con la asistencia de un helicóptero Bell 412 y un equipo de búsqueda y salvamento de la FACh.
Revista: Diálogo